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Dependencia emocional
        

“El desapego no es desamor, sino una manera sana de relacionarse, cuyas premisas son: independencia, no posesividad y tampoco adicción”. —Walter Riso—

La dependencia emocional o afectiva es un término utilizado fundamentalmente en los ámbitos sociales partiendo de constructos lingüísticos populares. Es por eso que identificar las principales manifestaciones clínicas resulta complejo, dado que algunas de las conductas y estilos de pensamiento propios de las personas que la presentan pasan inadvertidos, básicamente por la dificultad del individuo para reconocer su problemática, así como la aceptación social que acompaña dichas manifestaciones.

Dependencia emocional según las distintas áreas

• Área cognitiva: Se establece por medio del aprendizaje de relaciones y asociaciones que atribuyen características sobrevaloradas a la pareja, lo que lleva a la persona a relacionarse en función no de cómo son en realidad, sino de cómo quiere que sean los otros. Con el paso del tiempo, la preocupación excesiva por agradar y complacer a la persona de la que se depende, se convierte en una modificación conductual para asegurar la presencia de esa persona.

• Área conductual:Se pueden observar comportamientos tales como la expresión de emociones intensas o la atención exclusiva a la persona objeto de dependencia, dejando de lado necesidades e intereses personales. Otro comportamiento habitual es la búsqueda activa de atención que asegure la permanencia de la pareja.

• Área emocional: Esta área se caracteriza por la inestabilidad emocional que suele manifestarse en las personas que presentan una dependencia emocional. Dentro de sus relaciones tienden a presentar altas y bajas emocionales, los conflictos aumentan su frecuencia y poseen niveles bajos en su regulación.

Características de la dependencia emocional

Puede describirse a partir de un patrón de comportamientos emitidos por una persona que afecta directamente las relaciones interpersonales o de pareja y cuya funcionalidad puede derivar en la obtención de atención, mantenimiento de la cercanía o evitación de ciertos eventos amenazantes, tales como una discusión o la pérdida del vínculo afectivo.

Entre los síntomas de la dependencia emocional se encuentran los siguientes:

• Exigirle al otro que dé más muestras de afecto, ya que si no, se puede interpretar como un “no soy importante”.
• Necesidad de control sobre la otra persona.
• Dejar de ser uno mismo para agradar más a la otra persona y de esta forma asegurarse de que le siga eligiendo.
• Sentir pánico frente a la idea de abandono.
• Se va dejando el círculo social de lado para que esa persona se convierta en el centro de nuestra vida.
• La relación genera ansiedad.
• Existen rupturas reiteradas y constantes reconciliaciones con propósitos de cambio que no se ejecutan.
• Es muy probable que en realidad la persona dependiente no guste de la otra persona y sienta que sufre mucho, pero aún así no quiere dejarla ir.

            

Consecuencias de la dependencia emocional

Todas estas características de dependencia emocional pueden desencadenar una sintomatología patológica en la persona, que se puede traducir por ejemplo en ansiedad, obsesiones, depresión, etc.
Cualquier tipo de relación puede verse afectada, no sólo de pareja. Cuando una persona comienza a depender emocionalmente de otra, lo que acaba sufriendo a nivel psicológico es:

Relaciones desequilibradas: Se establece una rutina en la que el dependiente siente ese desequilibrio porque, en muchas ocasiones, pide cosas imposibles a la pareja.

Baja autoestima: La autoimagen, el reconocimiento propio o el amor hacia uno mismo se ven deteriorados. La persona no logra estar bien consigo misma y busca en el otro satisfacer las necesidades que por sí sola no logra.

Ansiedad:Se vive en un estado permanente de estrés y miedo al abandono. La dependencia emocional se ve alimentada por un mal aprendizaje en la forma de gestionar las relaciones interpersonales, siendo este un problema que se vuelve cada vez más evidente a medida que la persona va creciendo.

Consecuencias de la dependencia emocional

• Identifique sus conductas dependientes: Se establece una rutina en la que el dependiente siente ese desequilibrio porque, en muchas ocasiones, pide cosas imposibles a la pareja.

• Afronte el miedo a la pérdida de la pareja: La autoimagen, el reconocimiento propio o el amor hacia uno mismo se ven deteriorados. La persona no logra estar bien consigo misma y busca en el otro satisfacer las necesidades que por sí sola no logra.

• Enfóquese en los temas fuertes de su vida: Se vive en un estado permanente de estrés y miedo al abandono. La dependencia emocional se ve alimentada por un mal aprendizaje en la forma de gestionar las relaciones interpersonales, siendo este un problema que se vuelve cada vez más evidente a medida que la persona va creciendo.

• La autoestima es la clave principal: Se vive en un estado permanente de estrés y miedo al abandono. La dependencia emocional se ve alimentada por un mal aprendizaje en la forma de gestionar las relaciones interpersonales, siendo este un problema que se vuelve cada vez más evidente a medida que la persona va creciendo.

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Bibliografía

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Congost, S. (s.f.). Manual de dependencia emocional afectiva.
Racionero-Plaza, S. (2017). Relaciones humanas de calidad como contexto de salud y libertad. Revista de Fomento Socia, 43–63.
Izquierdo Martínez, S., & Gómez-Acosta, A. (2013). Dependencia Afectiva: abordaje desde una perspectivcontextual. Psychologia. Avances de la disciplina, 81-91.